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SOMERS: Es tiempo de que U.V.a y Charlottesville esclarezcan la delincuencia

Cómo resolviendo la contaminación lumínica podrá reducir la delincuencia

Los estudiantes deben participar activamente en el bicentenario y las conversaciones críticas de la celebración.
Los estudiantes deben participar activamente en el bicentenario y las conversaciones críticas de la celebración.

El artículo no expresa las opiniones o posiciones de los traductores. El artículo es una versión traducida del artículo que se encuentra a continuación: enlace

Escritor original: Luke Somers

Traducido por: Giuliana Rejalaga y Leon Arceo

A raíz del reporte anual de seguridad contra incendios de la Universidad y el reciente incremento de alertas de comunidad, es hora que la Universidad y la comunidad de Charlottesville tomen acción aparte de expandir su ya generosa fuerza policial. Hay varias estrategias alternativas para disminuir la delincuencia en y alrededor de Grounds. Cambiando las estructuras de iluminación alrededor de Grounds es un ejemplo que podrá resultar en un aumento en seguridad estudiantil.  

Hasta ahora, la Universidad se ha concentrado en cambios en la fuerza policial. Sin embargo, muchos estudiantes y residentes sienten que la expansión del Departamento Policial de Charlottesville, el Departamento Policial de la Universidad y los embajadores no disuadirá la delincuencia ni dejará a los estudiantes sentirse seguros, una carta ya se ha enviado a la Universidad por los Jóvenes Socialistas Democráticos de América en U.Va., revelando múltiples preocupaciones que los estudiantes tienen con UPD. En última instancia, la Universidad sintió que creando el Escuadrón de Policía Orientado a la Comunidad era la mejor solución para estos problemas.  Mientras que no vigilan Grounds 24/7, estarán generalmente activos durante los tiempos más ocupados de la semana, jueves a sábado, entre la horas de 7:00 p.m. y 3:00 a.m. Desde que no hemos visto como ampliando la presencia de la policía podrá ayudar, por lo menos hasta que obtengamos mejores datos, es merecedor enfocarse en soluciones alternativas.  

Cambiar el ambiente en que vivimos en vez de aumentar severamente la presencia de la policía es una solución necesaria.  Esto se puede hacer en varias formas, reasignación de recursos fuera del departamento de policía a centros comunitarios, centros de salud mental y escuelas. Simultáneamente, debemos animar una comunidad basada en la compasión y la cooperación en vez de la  individualización y competencia. Sin embargo, una solución que es raramente discutida además de las propuestas de arriba es redirigir la luz.  Específicamente, las luces en Grounds, que sirven al propósito de iluminar lugares oscuros, están diseñadas y dirigidas ineficientemente. 

Las fuentes de luz mal diseñadas permiten que el exceso de luz escape de su fuente y causen cuatro tipos de contaminación lumínica: deslumbramiento, brillo del cielo, traspaso de luz y desorden. La contaminación lumínica es causada principalmente por un mal diseño de iluminación, que permite que la luz artificial brille hacia afuera y hacia arriba en el cielo, en lugar de enfocarse en el área deseada. Las fuentes de contaminación lumínica consisten de farolas, luces exteriores en casas y negocios, letreros luminosos y letreros de neón. Los Grounds están rodeados de lámparas y luces que iluminan pasillos, escaleras, estatuas y más para estudiantes y locales. Sin embargo, esta plaga de rayos rara vez tiene algún tipo de escudo y escapa a nuestra atmósfera en lugar de dirigirse hacia abajo.

La luz hace que las personas se sientan seguras y, por lo tanto, las personas tienden a viajar por áreas bien iluminadas. Sin embargo, los diseños de iluminación deficientes pueden causar deslumbramiento, lo cual puede permitir que los delincuentes utilicen una iluminación inadecuada para su beneficio. Los delincuentes pueden tanto esconderse como detectar víctimas en nuestros puntos ciegos. Además, el resplandor de las luces brillantes sin protección en realidad disminuye la seguridad, ya que brilla en nuestros ojos y contrae nuestras pupilas. El deslumbramiento también dificulta que nuestros ojos se adapten a condiciones de poca luz.

La Universidad ha tomado algunas medidas para mitigar la contaminación lumínica y el deslumbramiento. En algunas áreas recientemente desarrolladas, los artefactos de iluminación para exteriores están medio protegidos y otros apuntan directamente al suelo. Sin embargo, hay más que la Universidad y Charlottesville pueden hacer. Por ejemplo, implementando el uso de luminarias totalmente protegidas y de bajo consumo de luz. Esto reduciría en gran medida el deslumbramiento y dirigiría la luz de regreso a su camino. Además, se prefieren las luces LED modificadas que emiten una luz amarillenta más cálida a la luz blanca brillante que ciega los ojos y dificulta la adaptación a la noche. La instalación de luces y detectores de movimiento también puede alarmar a los infractores y alertar a los residentes o transeúntes mientras se reduce la contaminación lumínica.

En lugar de centrar toda nuestra atención en los departamentos de policía, también podemos centrarnos en nuestro entorno. El lugar donde vivimos afecta nuestro comportamiento y estilo de vida. Nuestro ambiente es más que solo luz: es transporte, vivienda, energía renovable y sostenibilidad. Ya estamos viendo que los estudiantes exigen un cambio con respecto a los combustibles fósiles. Fomentar esa mejora en la contaminación lumínica sería un paso gigante. Es nuestro deber hacer que nuestros espacios sean óptimos y seguros, tanto en materia de sustentabilidad como de delincuencia.

Luke Somers es un estudiante de tercer año en la Facultad de Artes y Ciencias. Puede ser contactado en opinion@cavalierdaily.com

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