Nota de la editora: Este artículo fue escrito originalmente por Cecilia Mould y Naima Sawaya el 27 de junio de 2025. Trabajamos para preservar el significado original en la traducción, pero no podemos garantizarlo.
El Presidente de la Universidad Jim Ryan anunció su renuncia a la comunidad de la Universidad el viernes por la tarde, según la aceptación del Consejo de Visitantes por su renuncia el jueves, En su declaración, se envió vía correo electrónico a la completa comunidad, Ryan dijo que eligiendo a permanecer en su posición amenazaría las ocupaciones de los empleados, la financiación de los investigadores y el apoyo financiero y el acceso a las visas de los estudiantes.
«Estoy inclinado a luchar por lo que creo, y creo profundamente en esta Universidad. Pero no puedo tomar una decisión unilateral para luchar contra el gobierno federal para que salve mi propio trabajo,» escribió Ryan.
Robert Hardie, saliente Rector del Consejo, confirmó en una declaración al Cavalier Daily que él aceptó la renuncia de Ryan en nombre del Consejo “con profunda tristeza.”
«Jim Ryan ha sido un extraordinario presidente de esta gran Universidad. Él guió nuestra institución a alturas sin precedente, siempre haciéndolo con gracia y humildad,» escribió Hardie. «... La U.Va. para siempre ha sido cambiada para mejor como resultado del liderazgo excepcional de Jim.»
Esta renuncia sigue una investigación en desarrollo llevada a cabo por el Departamento de Justicia por el liderazgo de Ryan y lo que vio como el rechazo de Ryan para desmontar las políticas de Diversidad, Equidad e Inclusión en la Universidad. The New York Times informó el jueves de que funcionarios del departamento habían exigido la dimisión de Ryan en negociaciones privadas con la Junta de Visitadores.
La Asistente del Fiscal General Harmeet Dhillon para la División de Derechos Civiles, en una declaración escrita al Cavalier Daily, dijo que el Departamento de Justicia tiene una política “cero tolerancia” hacía la discriminación ilegal en las universidades financiadas con fondos públicos.
«Cuando líderes universitarios falta el compromiso de acabar con la discriminación ilegal en la contratación, las admissiónes, y los beneficios estudiantiles— ellos exponen a las instituciones que dirigen a peligro financiero e legal,» dijo Dhillon en la declaración. «Nosotros acogemos cambios de liderazgo en la educación superior que señalan compromiso institucional para las venerables leyes de derechos civiles federales de nuestro nación»
A finales de abril, el Departamento de Justicia envió una carta a la Universidad en la que fijaba el 2 de mayo como fecha límite para que ésta presentara un informe que demostrara que había desmantelado por completo todas las iniciativas y políticas de DEI. Este plazo se amplió finalmente hasta el 30 de mayo. No está claro si la Universidad presentó dicho informe.
El Departamento de Justicia alega que Ryan incumplió la directiva de desmantelar los programas de DEI en la Universidad y ha tergiversado los esfuerzos realizados por su administración para cumplir la ley federal.
En una declaración escrita a The Cavalier Daily antes de la dimisión de Ryan, la portavoz de la Universidad Bethanie Glover dijo que la Universidad está trabajando estrechamente con el Departamento de Justicia.
«La UVA se compromete a cumplir todas las leyes federales y ha cooperado con el Departamento de Justicia en las investigaciones en curso», declaró Glover. «El apoyo del gobierno federal a la Universidad es esencial para continuar con la misión principal de investigación, educación y atención clínica».
La Junta disolvió la Oficina de DEI y Asociaciones Comunitarias el 7 de marzo, de acuerdo con una directiva de la administración del presidente Donald Trump, y solicitó que Ryan y su administración presentaran un documento 30 días después que detallara las acciones que habían tomado para abordar la directiva de la Junta.
El Cavalier Daily presentó una solicitud de la Ley de Libertad de Información a la Universidad para este documento y se le dijo que estaba protegido bajo «comunicaciones presidenciales».
El Departamento de Justicia dijo que si Ryan no dimitía, la Universidad corría el riesgo de perder cientos de millones en fondos de investigación, según el New York Times.
Los senadores Tim Kaine y Mark Warner compartieron una declaración pública conjunta tras el artículo del New York Times, vinculando la renuncia de Ryan a lo que consideran una «guerra cultural» más amplia del presidente Donald Trump contra las universidades estadounidenses.
«Es indignante que los funcionarios del Departamento de Justicia de Trump exigieran a la universidad mundialmente reconocida de la Commonwealth que destituyera al presidente Ryan -un líder fuerte que ha servido a la UVA honorablemente y ha hecho avanzar a la universidad- por ridículas trampas de “guerra cultural”», rezaba el comunicado.
En su correo electrónico a la comunidad, Ryan dijo que había planeado dimitir el año que viene -por razones ajenas a la actual presión política a la que se ha enfrentado su administración-, pero que las circunstancias actuales le empujaban a dimitir ahora.
«Aunque hay principios muy importantes en juego aquí, a un nivel muy práctico estaría luchando por mantener mi trabajo un año más mientras sacrifico a sabiendas y voluntariamente a otros en esta comunidad», escribió Ryan. «... No podría en conciencia causar un daño real y directo a mis colegas y a nuestros estudiantes para preservar mi propio puesto».
Según el New York Times, la carta de Ryan a la Junta decía que su dimisión podría ser efectiva inmediatamente pero no más tarde del 15 de agosto de 2025.